El primer paso es dejarle en ropa interior para que conozca
que es aquello que sale de su cuerpo, tienes que darle tiempo y tener mucha
paciencia, aparte de no intervenir en el tiempo que necesite. Después de
hacerse encima varias veces y varios días encima, empezará a saber que es pipi
y popó. No se debe regañar, ni castigar cuando se haga encima, aún no ha salido
del proceso y hay que tener paciencia para limpiar cuando se haga encima. La idea es
sacar el pañal la mayor cantidad de horas al día, aunque tengas que limpiar.
Esto es para que identifique la
sensación, poco a poco le vas nombrando
que es es pipi o popó. Al principio se
sorprende, después va conociendo y en
unos días controla, aguanta hasta llegar
a un lugar donde quiere hacer, entonces es el momento de al verle las ganas de
hacer le puedes llevar al baño, justo en ese momento que da las claras señales
de querer hacer, lo ideal es que antes hayan visto a mamá o papá usándolo.
Es una forma de ellos sentir eso que sale de su
cuerpo.
Si lo haces así, les irá bien, no tengas miedo, hay
situaciones donde podemos ayudarles a pasar al siguiente nivel, más si es de
manera armoniosa, sobre todo cuando ya han pasado los 2 años y medio y por algún
motivo se les debe enseñar, sin forzar ni castigar.
El pañal de noche se le coloca hasta que amanezca por
lo menos una semana sin mojarlo, lleva pañales cuando salgan por si te pide
hacer pis y no hay baños cerca, se lo pones y listo, aunque llegará un momento
que se niegan hacer en el pañal.
Cuando veas que no necesita el pañal de la noche, pon
un plástico debajo de las sábanas por si hay un accidente, lo haces un mes y ya
luego no será necesario. La ventaja de esta manera de controlar esfínteres es
que ellos saben que sale de su cuerpo, mientras que sentarles en el baño sin
saber que se espera de ellos los atrasa más y se agobia el niño y la familia.
El control de esfínteres debe darse desde la paciencia,
nosotros los adultos colocamos el pañal por comodidad y este pasa a formar
parte de los niños, por lo tanto debemos quitarlo con calma, mirando siempre
las necesidades emocionales de los niños, no desde la mirada adulta porque
empieza el colegio o porque el hijo de la vecina ya no los usa.
El protagonista de esta historia es tu hijo, no la
gente, toma en cuenta al pequeño para que así este paso sea dado de la manera
más armoniosa posible.
Debemos tomar en cuenta que muchas veces después de
lograr el control total de esfínteres, pueden haber motivos para el niño
hacerse encima, por ejemplo la muerte de un familiar, una mudanza, la llegada
de nuevos miembros a la familia, como todo en el tema crianza y educación, si
les tenemos paciencia llegaremos al siguiente nivel con más seguridad y la
parte emocional lo más intacta posible.
Muchas Gracias! hacía mucho que estaba necesitando este enfoque :)
ResponderEliminarGracias me falta pero tengo mucho miedo d esa etapa..
ResponderEliminarGracias me falta pero tengo mucho miedo d esa etapa..
ResponderEliminarGracias me falta pero tengo mucho miedo d esa etapa..
ResponderEliminarGracias! voy por buen camino entonces.
ResponderEliminar